El tramo recorrido es fácil, pues se trata de un camino en buen estado y sin excesivas pendientes.
Seguidamente recorrimos su fértil vega regada por riachuelos de aguas puras de Sierra Nevada que bajan desde las alturas del Picón de Jeres hasta la llanura y el Geoparque de Granada.
Jeres y su vega que ya hemos atravesado. |
Pronto llegamos a los secanos y a los pinares con algún resto de bosque de las primitivas encinas. Subimos a un otero que domina el llano de la Comarca de Guadix.
Pinares en las faldas de Sierra Nevada. |
Las encinas vuelven a crecer para formar de nuevo los antiguos bosques. |
En la cumbre de este monte u otero se encuentra una pequeña ermita, sin obras de arte ni ninguna riqueza, pero rica en sentimiento religioso y magia, está dedicada a la Virgen de la Cabeza; en su interior, bajo una antigua y sobria armadura de gruesas vigas de madera, encontraremos sencillas ofrendas de agradecimiento de las gentes del lugar a la Virgen por algún favor recibido por su intercesión ante Dios.
Sobre un poyo, en un rincón de la ermita, algún devoto ha colocado un tierno angelillo al que acompañan algunas velas, muestra del sentir del pueblo honesto y trabajador de la zona. |
Después bajaremos hasta la playa interior de Cogollos, un pequeño pantano o gran balsa que almacena agua y acoge un lugar de esparcimiento para los lugareños.
En nuestro caminar llegaremos a la vega de Cogollos de Guadix y a la localidad con sus casas tradicionales, distintas a las andaluzas y con alguna influencia murciana.
En su casco antiguo conserva un viejo aljibe adaptado a nuevos usos y un bello templo mudéjar con una elevadísima torre inspirada en la de la catedral de Guadix.
La iglesia, un ejemplo de respetuosa integración intercultural por su estilo Mudéjar Granadino y los cristianos cristianos del siglo XVI al XVIII: Gótico, Renacimiento y Barroco Granadino. |
Casa con hermosas molduras inspiradas en las levantinas. |
Antigua casa con arco morisco. Sus dovelas de ladrillo tienen un centro de despiece distinto al de curvatura. |
Antigua casa con el gran alero y baranda de balcón emplomada y con labor de forja. |
Y aquí dimos por finalizado el recorrido, aunque seguimos por el mismo camino, pero ya en automóvil, hasta Guadix y nuestra localidad de origen.
A nuestras espaldas quedan la gran torre de Cogollos y el lejano Jeres del Marquesado ambos al pie de la gran mole del Mons Solaris (Sierra Nevada para los romanos) |
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